ALBERTO ME PARECE QUE ERA TU NOMBRE... O NO?

Si, creo que asi te llamas, no recuerdo bien pero fuimos felices durante dos semanas, tiempo en que te entregue lo que quedo de mi virginidad,  despues todo fue lastima y tonterias, bueno que se puede esperar a los 19 años pues no mucho, era muy tonta y novata en eso del amor, tu mi primer amor y mi primer experiencia dolosa, pero que bruta fui al seguir contigo despues de la estupidez que cometiste, mas bruta fui al sentir lastima por tu sufrimiento, fijate que se me hizo una maldita costumbre que aun mantego, bruta bruta ja.
Eramos uno para el otro, guapos, sexys, delgados y buenones, muy amena compatibilidad de cama, muy rico sexo sexo sexo y sexo, asi muy estilizados ambos, encajabamos entre piernas y besos y babas, lo único que nos falto fue amor, confianza y madurez, sobre todo madurez. Oyes recuerdas la ocasion que me confesaste tu infidelidad, pues veras que si sufri mucho, me dolio porque pensaba darte la oportunidad de que entraras a mi vida y pudiera amarte y aceptarte como eras y compartieramos una vida juntos, me dolio porque por  primera vez pense en tener una  pareja estable, bueno no fue asi, tuviste tu encuentro amoroso con esa otra y despues todo fue un desastre: comence a odiarte, a sentir lastima por ti, a madurar y necesitar otra persona en mi vida, comence a olvidarte con Noe, hermoso niño de pene grande duro y lastimoso para mi cuasi virginal cuerpo y mente. No oyes, con Noe todo era aventura, felicidad y travesuras, habria sido el hombre perfecto salvo por el detalle de su esposa, sin contar esta última, todo era perfecto con el y los antros, las escapadas en la comida, las noches juntos, la cogedera en el bar Celebrations, (que noche aquella en el sillón de la esquina, las limonadas y las penetraciones y venidas de lujo, el guardia con la cara de tarado y sin poder atinar a lo que haciamos), todo era muy lindo y rico con Noe, hasta que beto beto, finalmente creiste descubrir mi romance y pretendiste cuidarme y dedicarme tu tiempo dedicado anteriormente a la otra, pero, ya era tarde, ya no te necesitaba y por ello me fui de tu vida sin mas preambulos, sin miramientos y con la ilusión de encontrar un nuevo amor...